jueves, 17 de octubre de 2019

Una gran segunda parte da la victoria en al BCL (90-76).

No defraudó el primer partido oficial del San Pablo Burgos en la Basketball Champions League. El conjunto de Joan Peñarroya superó con una gran segunda parte a un combativo Telenet Giants Antwerp (90-76) ante un entregado Coliseum. El equipo inmobiliario supo sufrir ante un equipo belga que se  mostró como un equipo muy competitivo y que sólo dio su brazo a torcer en los minutos finales del choque.


Tras un inicio igualado, el Giants Antwerp se marchó en el marcador al filo del descanso merced a un muy buen juego buscando los huecos en la pintura burgalesa. Tras el paso por vestuarios, el conjunto local se puso el mono de trabajo y volvió a defender como sabe y tras remontar el partido sentenció en los minutos finales. Resultó clave en ese cuarto Benite, que con 3 triples consecutivos rompió la resistencia de un correoso equipo belga que va a dar mucha guerra y a más de uno le dará un susto en la fase de grupos.


LA CRÓNICA

Inicio igualado (21-21)

El partido empezó con un toma y daca constante. A cada canasta del Antwerp, que llevó la iniciativa del partido, respondía el San Pablo con la misma moneda (10-12 min 5).

Kasteloot era una pesadilla para un Miraflores que se las veía y se las deseaba para frenar a los polivalentes jugadores belgas. Clark era el mejor de un San Pablo que al final del cuarto dejaba el partido en tablas (21-21 min 10).

Antwerp se va (23-30)

El partido iba por el mismo camino e iba avanzando poco a poco. Kasteloot encontraba ahora la resistencia de Lima, y mediado el cuarto la diferencia era mínima (32-36 min 15).

La entrada en pista de Rupnik cambiaba el encuentro. Con él en pista, el Antwerp tuvo mucha más mordida en ataque, encontrando lanzamientos librados y sacando muchísimo provecho de la puerta atrás en una despistada defensa burgalesa. Al paso por vestuarios, el electrónico mostraba un preocupante 44-51 y gracias, ya que la ventaja belga llegó a ser de 10 puntos.


Reacción burgalesa (25-15)

El paso por los vestuarios cambió el encuentro. El San Pablo salía enrabietado de los bajos del Coliseum. La defensa empezaba a funcionar y en ataque la batuta de Fitipaldo se hacía notar. Los triples volvían a entrar y en un abrir y cerrar de ojos la diferencia en el marcador se reducía a la mínima expresión (57-59 min 25).

La entrada de Barrera daba un punto más atrás a un San Pablo que defendía al límite . El  Antwerp empezaba a volver al partido, pero Huskic conseguía liderar al San Pablo con un gran derroche en ataque bajo los aros. El 69-66 del final de cuarto dejaba todo para los últimos 10 minutos.

Los triples de Benite (21-10)

El partido comenzó los últimos 10 minutos lleno de tensión. Las muñecas se agarrotaban y encestar costaba horrores. El San Pablo encontró refugio en el lanzamiento lejano, aunque un voluntarioso Antwerp no le perdía la cara al choque (78-72 min 35).

En ese momento apareció Benite. El escolta brasileño del San Pablo se rehacía de un mal encuentro con 3 triples consecutivos que rompían el marcador de forma casi definitiva. el equipo belga bajaba los brazos y se dejaba llevar hasta el 90-76 final, la mayor diferencia del partido a favor del San Pablo.



LAS CLAVES

- La defensa: en la primera parte, el conjunto inmobiliario recibió la friolera de 51 puntos. Hasta ahora, el conjunto de Peñarroya se ha destacado por una intensidad defensiva muy alta que ayuda a conseguir posiciones de ataque más claras al impedir que la defensa contraria se recomponga. Frente al conjunto belga y durante la primera parte, esa defensa brilló por su ausencia. 

Para el buen del desarrollo del partido, esa situación cambió tras el paso por vestuarios, y volvió el Miraflores que todos conocemos en zona propia. El mejor reflejo de esta mejoría fueron los 25 puntos recibidos en toda la segunda parte, la mitad de lo que había encajado antes del descanso.


- La puerta atrás del Antwerp: se llama puerta atrás en baloncesto a la acción que realiza un jugador para avanzar hacia canasta por detrás de la defensa del conjunto rival. El resultado suelen ser canastas fáciles en las inmediaciones del aro, vamos, 2 puntos fáciles. 

Durante la primera mitad, el Antwerp realizó esta acción de manera satisfactoria varias veces. Los puntos llegaban con mucha facilidad y de ahí que llegaran a coquetear con la decena de tantos de ventaja. Tras el descanso el Miraflores cerró su hueco en defensa y recibió la mitad de puntos.

- Muy difícil de defender: el equipo belga se mostró en el Coliseum como un equipo muy bien trabajado. Los jugadores del plantel que dirige Beghin son muy versátiles y pueden ocupar varias posiciones en pista. Como mejor ejemplo Kasteloot, capaz de jugar de escolta, alero o ala-pívot indistintamente. 

Es algo que la San Pablo le costó durante muchos minutos del partido. Tan pronto McFadden defendía a un jugador en la línea de 3 como 5 segundos después se encontraba sufriendo al poste bajo. Tras el descanso Peñarroya y los suyos supieron lidiar mucho mejor con esta característica del conjunto belga.

- Fitipaldo, Huskic y Benite: cada uno en un momento del partido. Fitipaldo fue clave en la reacción del San Pablo en el tercer cuarto. Anotando y sobre todo dirigiendo al conjunto burgalés. Huskic fue el sustento del equipo en al primera parte y en los instantes finales del tercero. Así amortiguó un partido bastante discreto en labores defensivas. Benite así mismo enmendó su partido con 3 triples seguidos en el último cuarto que acabaron con la resistencia del conjunto belga.



EL MVP

Bruno Fitipaldo: gran partido, el segundo consecutivo, del base charrúa. No fue el más valorado del equipo (fue Huskic con 21 de valoración) pero a sus 14 puntos y 8 asistencias para 20 de valoración hay que sumarle el +21 del San Pablo con el uruguayo en pista.

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