El San Pablo Burgos empieza su particular cuesta de noviembre-diciembre en la Basketball Campions League. El conjunto burgalés viaja hasta Grecia para hacer frente al AEK de Atenas (miercoles 13 de noviembre 18:00 horas hora española, DAZN) en un choque en el que Joan Peñarroya y los suyos hacen frente a uno de los grandes favoritos al título continental. El conjunto burgalés llega al partido en un mal momento con 5 derrotas consecutivas y un parcial de 1-6 tras empezar la campaña con un inmaculado 7-0 en el balance victorias-derrotas.
El AEK de Atenas es por plantilla y por lo que se ha visto hasta el momento, uno de los favoritos al título de la BCL. Cuenta con un balance de 3-1 en la competición, y solo ha perdido en la jornada inaugural frente al Hapoel Jerusalén, otro de los firmes candidatos al título y próximo rival del San Pablo. Mal partido para intentar un cambio de tendencia que ya empieza a ser urgente. El buen inicio de campaña ha dado cierto margen de maniobra, pero el colchón ya se está agotando. En la ACB cuentan con 2 victorias de margen con el descenso y en la BCL el 2-2 que atesora no es nada halagüeño ya que en los próximos partidos va a hacer frente a los 3 líderes del grupo y de los siguientes 5 partidos en Europa incluyendo el de este martes, 4 son lejos del Coliseum.
AEK ATENAS
El conjunto dirigido por Ilias Papatheodorou ha apostado fuerte este año. La ausencia en su liga doméstica del Olympiakos le abre una puerta que le puede permitir luchar por un título liguero que no conoce desde el año 2002. Campeón el año pasado de la Copa Griega, y hace 2 de la Basketball Champions League, esta campaña parece volver a querer luchar por todo. Para ello, ha confeccionado una plantilla con jugadores muy contrastados a nivel europeo pero ya veteranos. No obstante, su columna vertebral (los Chalmers, Langford, Maciulis, Slaughter o Mavroeidis) superan con holgura la treintena.
La plantilla
El plantel de bases de los griegos asusta. El recién llegado es Mario Chalmers, un clásico ya en Europa que fue campeón de la NBA a los mandos de los Miami Heat de Wade, LeBron James y Chris Bosh. Es un jugador con un muy buen lanzamiento exterior y un director de juego solvente. A su lado, uno de los fichajes más importantes de este año en la BCL, Kendrick Ray. El americano es el prototipo de base explosivo muy vistoso y al que se le caen los puntos de las manos. De momento no está cumpliendo con las expectativas creadas a su entorno, en gran parte por los problemas físicos que arrastra. La tercera pata del banco es el local Nikos Gkikas, el típico de base director de juego y bueno en defensa al que conviene no dejarle un solo centímetro de hueco porque aunque no es lo suyo también es capaz de anotar cuando su equipo lo requiere.
En posiciones exteriores, un clásico de Euroliga, varias veces máximo anotador de la competición auspiciada por los clubes, Keith Langford. El veterano escolta (36 años) sigue en plena forma anotando muchos puntos (21.0 de media) y con unos porcentajes de acierto tremendos (61% en triples). Jugador de ataque total, es un anotador frío que no suele precipitarse ni busca forzar los tiros. A su lado, el que es probablemente el jugador más completo de la competición, el cubano-estadounidense Howard Saint-Ross. Sus espectaculares números (12.3 puntos, 7.3 rebotes y 5.8 asistencias) hablan a las claras del tipo de jugador del que se trata. Siempre suma para su equipo y sabe echarse a un lado si un compañero está más acertado de cara al aro. Buen defensor, el alero es una de las claves de este equipo. La rotación empieza con el veterano lituano Jonas Maciulis, un jugador duro como una roca y que es capaz de anotar tanto con triples lejanos, como dentro de la zona gracias a su corpulencia. Como Saint-Ross, es un jugador de equipo. Completan la rotación 2 jugadores helenos. El primero es Linos Chrysikopulos, un alero alto con buena mano dese lejos y Vassilis Toliopoulos, un jugador de equipo que aprovecha sus escasos minutos para sumar para el grupo.
La rotación interior empieza con Marcus Slaughter. Viejo conocido en España (jugó en el Real Madrid y en el C.B. Valladolid) destaca en el aspecto físico, siendo un reboteador y defensor brutal, muy rápido y duro. Suple con intensidad su falta de centímetros (203) y es un jugador clave en el equipo griego. No obstante tiene el mejor +/- del equipo (+17.3 puntos con él en pista). Los puntos y el talento en ataque lo pone Stefan Jankovic, un 4/5 serbio de gran calidad, capaz de anotar casi desde cualquier punto de la cancha. Sin embargo, el balcánico es un jugador muy irregular y le cuesta sacar todo su potencial a relucir. La rotación empieza por el local Dimitris Mavroeidis, otro veterano que ha jugado toda su vida en Euroliga (Barcelona y Olympiakos sobre todo) y aporta mucha presencia física y defensa. Su sola presencia en pista condiciona el juego. De ala-pívot suplente está el local Gharis Gianopoulos, un jugador de equipo que abre el campo con su lanzamiento de 3 puntos. Por último, Kaklamanis, con un papel testimonial.
Cómo juega
El equipo de Papatheodorou cuenta en su plantilla con el mejor juego exterior de la competición. Sin embargo, su mayor virtud es la defensa, apoyado en un juego interior prácticamente inexpugnable que evita que los equipos contrarios sumen puntos fáciles en las cercanías del aro. Por fuera, el despliegue de Saint-Ross, Gkikas o Maciulis también cierra las opciones de tiros cómodos desde la línea de 3.
Los bases Chalmers y Ray, son muy anotadores, al igual que Langford. Maciulis y Saint Ross ponen el equilibrio y la mesura en el equipo siendo también productivos en ataque. El conjunto heleno cuenta así mismo con muy buenos porcentajes en tiros de 3 puntos, y Langford y Ray son jugadores que anotan más con bandejas debajo de canasta que con tiros exteriores. En la pintura, el conjunto heleno cuenta con jugadores muy físicos y sacrificados atrás pero a los que les cuesta anotar. Cuando el equipo se atasca, Paptheodorou suele usar a Saint-Ross o Maciulis como falso "4" manteniendo así el nivel defensivo pero aumentando exponencialmente la capacidad en ataque.
LAS CLAVES
- La adaptación de Chalmers y el estado físico de Ray: los bases del conjunto heleno son hoy en día el gran quebradero de cabeza de Papatheodorou. Chalmers acaba de aterrizar en Atenas y Ray ha sido baja en los últimos 2 partidos del equipo heleno y es seria duda para jugar frente al San Pablo. Sin ellos el juego ofensivo del equipo se resiente mucho ya que pierde a 2 grandes generadores en anotación. Para suplirles, si es que hace falta, Gkikas hace de generador de juego y Langford toma un papel más importante en ataque y creando juego como falso base.
- El San Pablo, a hacer su juego: pese a que por plantilla y sobre todo por el momento que están pasando ambos equipos el AEK es el claro favorito al triunfo en este partido, hay un rayo de esperanza para los burgaleses. El juego del Miraflores es el que más daño le puede hacer al conjunto heleno. Al no apostar por el juego interior y fiar todo a los triples, el equipo de Peñarroya pasa de puntillas por la gran defensa de la pintura helena y centra más su juego en el perímetro, donde el conjunto de la capital griega cuenta con jugadores mejores en ataque pero mucho más débiles en defensa. Además, Tokoto es un jugador de corte parecido a Saint-Ross y Maciulis, y en una buena tarde puede anular la aportación de sus oponentes en ataque.
- A seguir con la mejoría: tras 2 partidos desastrosos, el San Pablo logró al menos mejorar su imagen en el partido frente a Iberostar Tenerife. Tras un gran último cuarto, el conjunto azul estuvo a punto de dar la sorpresa y remontar 12 puntos de diferencia en el cuarto final. Frente al AEK vencer va a estar bastante complicado también, pero si se quiere lograr la victoria hay que seguir dando esa buena imagen para tener alguna opción de victoria.
- Tapar la aportación de Saint-Ross: el alero americano con pasaporte cubano del AEK es la clave del equipo. Es capaz de hacer de todo en pista y se sacrifica por sus compañeros, dando lo que el grupo necesita. Si tiene que anotar, anota; si un compañero está en un momento dulce, asiste; y si hace falta ayudar en el rebote, lo hace a las mil maravillas.
El papel de Tokoto será clave para desactivar al alero del conjunto heleno. Sólo se puede parar su aportación aislándole del juego e intentando molestar cuando carga el rebote, algo que requiere un gran despliegue físico que el alero del San Pablo puede llegar a conseguir.
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