Por primera vez en su historia, el San Pablo Burgos salió victorioso del Fontes do Sar tras doblegar la Monbús Obradoiro (73-76) en el partido de la 17ª jornada de la Endesa ACB. El conjunto burgalés estuvo a punto de tirar por la borda 19 puntos de ventaja en un cuarto final lleno de imprecisiones y en el que la defensa brilló por su ausencia. Con este resultado, el Miraflores hace su trabajo y esperará una derrota de RETAbet Bilbao o Valencia Basket para certificar o no su presencia en la Copa del Rey.
Thad McFadden fue el héroe del partido. Muy acertado en el triple, el americano lideró durante muchos minutos al conjunto de Joan Peñarroya. El San Pablo manejó desde bien pronto ventajas superiores a la decena de puntos. Pese a un conato de remontada gallega tras el descanso, el conjunto azul aguantó bien, hasta que al poco del inicio del cuarto decisivo puso el +18 en el marcador. Ahí desapareció el Miraflores, que no llegó a perder el liderato en el marcador pero que sudó mucho para conseguir la victoria.
LA CRÓNICA
¿Dónde está el Obra? (14-25)
El partido empezaba un poco igualado, pero pronto se rompía. Obradoiro arracaba negado desde la línea de 3 y el Miraflroes iba a lo suyo (5-14 min 6).
Moncho intentaba cambiar el ritmo del partido, pero los locales no estaban especialmente finos. McFadden empezaba su exhibición anotadora, y en frente se encontraba con un equipo que todavía no sabía de qué iba la cosa. Al final del cuarto, el 14-25 se antojaba hasta escaso para lo poco que habían aportado los gallegos.
Los locales se escapan vivos (17-20)
El inicio del cuarto fue realmente malo. Ambos equipos se obcecaban en no anotar y pasaron más de 3 minutos sin una canasta en juego. Daum acertaba con el primer triple de Monbús Obradoiro al 12º intento, y al ecuador del cuarto el parcial era de un desolador 5-2 para el 19-27 global.
La vuelta a pista de McFadden animó el encuentro, y los jugadores locales empezaron a dar muestras de vida. Daum y Kravic se unían para mitigar los puntos del escolta americano, aunque al final del cuarto las canastas de Bassas ponían el 31-45 con el que ambos equipos enfilaron el túnel de vestuarios.
Reacción local estéril (16-15)
El inicio de la segunda parte fue calcado al del cuarto anterior. Ambos conjuntos salían con la mirilla muy desviada y acumularon más de 2 minutos sin canastas. Obradoiro reaccionaba por fin, y entre Brodziansky y Pozas metían el miedo en el cuerpo a Peñarroya (42-49 min 25).
El Miraflores despertó, y tras 6 puntos consecutivos de Benite las ventajas volvieron a rondar los 10 puntos en los que se habían movido durante casi toda la primera parte. Un triple final de McFadden ponía el 47-60 en el marcador que parecía finiquitar el partido.
El Miraflores se duerme al final (26-16)
El inicio del cuarto parecía sentenciar la contienda. Un 0-5 de parcial le daba un +18 al San Pablo que se relajó, demasiado. McGee entraba en partido y Brodziansky se sumaba a la fiesta ante un Miraflores que parecía que estaba recogiendo sus bártulos tras un trabajo bien hecho. La diferencia bajaba de 10 (60-69) tras un 2+1 de Daum en el ecuador del cuarto que obligaba a Peñarroya a pedir tiempo muerto.
No mejoró el panorama, ya que Brodziansky lograba un 5-0 que apretaba aún más las cosas. Tras un par de jugadas sin canasta, un triple de Clark daba 7 puntos de ventaja y mucha tranquilidad al banco azul. Pero lo que americano había dado, lo tiró por la borda un minuto después. Clark realizaba falta sobre un triple de Magee a 9 metros de canasta y volvía a dar vida a un irreductible Obra (71-74 min 39).
Llegaba el momento de la verdad y el San Pablo fallaba con un tiro precipitado de McFadden. Obra la tenía, y en otra jugada que sólo explica la falta de concentración, Benite le hacía una falta infantil a Daum cuando tenía en sus manos una canasta franca. El americano disponía de un tiro libre para empatar el partido con 8 segundos por jugarse, pero fallaba. El rebote le caía a McFadden que recibía falta y éste sí que no fallaba sus tiros libres.
Lo intentó hasta el final el conjunto gallego, pero Brodziansky no era capaz de contralar un saque de banda que acababa en pérdida y daba la victoria (73-76) a un San Pablo que casi tira por la borda 18 puntos de ventaja en 8 minutos.
LAS CLAVES
- La muñeca de McFadden: dentro de un partido gris de gran parte del San Pablo (sólo el propio McFadden, Lima y Fitipaldo sumaron 10 o más puntos de valoración), el escolta americano fue el faro que guió al equipo. Rompió el choque con sus triples y acudió al rescate siempre que el equipo le necesitó. Al final, incluso, solventó su mala selección de tiro en al penúltima posesión del lance con 2 tiros libres que remataron el encuentro.
- El tiro libre de Daum: podía haber cambiado el encuentro por completo. El americano, el mejor de Monbús Obradoiro en este partido, tuvo en su mano un tiro libre que hubiera empatado el choque con 8 segundos por delante. Por la dinámica que llevaba, una prórroga en principio le habría venido bien a los locales, más que nada porque con el 47-65 del minuto 32 de partido parecía completamente imposible.
Justo en ese momento, el Obradoiro falló. Tras un gran último cuarto, ese tiro que hubiera significado un antes y un después en el partido no salió. De todas formas, una prórroga hubiera sido un premio demasiado grande para un equipo que apenas jugó al baloncesto 2 minutos en el tercer cuarto y los 8 finales.
- El San Pablo se deshace en el último cuarto: tras verse 18 puntos arriba en el marcador, el conjunto inmobiliario se deshizo como el azúcar en una taza de café. Dejó de defender, bajó la intensidad y cuando quiso recomponerse, el Obradoiro creyó en un milagro imposible unos minutos antes.
Mención especial para las faltas personales en el último minuto. Clark regaló un 3+1 con una infracción completamente injustificable a un triple desde 9 metros de distancia. Por si fuera poco, Benite lo remató con otra tras un rebote de ataque en el que Daum tenía toda la ventaja del mundo. Fallos de concentración por no saber leer bien la jugada que casi cuestan un disgusto.
- Obradoiro, muy poco y con muchas bajas: de salida, los primeros 32 minutos del conjunto gallego fueron rematadamente malos. Sin más. Pero es cierto que el conjunto de Moncho Fernández apenas pudo contar con 7 jugadores en plenitud de condiciones, algo que les condicionó todo el partido.
Saltaron más a pista, pero a los 0 minutos de Spires hay que sumarle los menos de 10 de Calloway y Vasileiadis, entre algodones toda la semana y por lo visto en cancha lejos de estar al 100%; los 6 del lesionado De Zeew y los 8 de Font, un jugador joven y en fase de desarrollo.
EL MVP
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| Foto: acb.com |
Thad McFadden: enorme el partido del americano. Acabó el partido con 25 puntos y 6 rebotes para 26 de valoración. Logró un impresionante 7/8 en triples y fue el autor de los 2 tiros libres que pusieron el 73-76 final en el marcador.
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