lunes, 23 de diciembre de 2019

El San Pablo conquista el Buesa Arena (74-82).

Gran victoria del San Pablo Burgos en el Buesa Arena dentro de la 14ª jornada de la Endesa ACB. El conjunto castellano superó (74-82) al Kirolbet Baskonia en su feudo de Vitoria. En un partido duro y con pocas concesiones en el marcador, el Miraflores supo rehacerse en el último cuarto para remontar primero y rematar en los segundos finales a un conjunto vitoriano que está muy lejos de su teórico nivel. Destacar la presencia de más de 2000 burgaleses en las gradas del Buesa Arena, que hicieron sentir a su equipo como en casa. 


Partido clave para la Copa del Rey. Con esta victoria, el San Pablo ha conseguido dar un paso de gigante en sus aspiraciones. Bakonia, Valencia Basket, Joventut y MoraBanc Andorra han perdido esta jornada, devolviendo al San Pablo a puestos de Playoff con ventaja de 1 partido sobre un grupo muy amplio de equipos. En total, del 5º en la tabla al 12º solo hay una victoria de diferencia, y el billete para Málaga va a estar especialmente caro este año. 

LA CRÓNICA

Stauskas vs Miraflores (16-18)

El partido empezó frío. Las defensas se imponían y las pérdidas de balón eran constantes por ambos bandos. Poco a poco el San Pablo se asentó mejor en el campo y a base de triples y del buen hacer de Lima bajo los tableros empezó a mostrar mejores sensaciones (13-11 min5).

Kirolbet Baskonia aguantaba a base de acciones individuales de Stauskas (7 puntos en este cuarto) que soliviantaban el mal partido en general del grupo. Hasta 3 ataques seguidos concedieron los locales sin lanzar a canasta, algo que el San Pablo no supo aprovechar. Al final del cuarto, el Miraflores ganaba con un escueto 16-18 en el electrónico.

Baskonia se escapa vivo (15-14)

El 2º periodo llegó con un cambio de dinámica. Baskonia se entonaba y retomaba la iniciativa en el partido y el conjunto visitante aguantaba el tirón con Benite como líder (24-25 min 15).

El partido se embarraba, y anotar era un auténtico lujo. Llegaron los peores minutos de ambos equipos, con muy poco acierto y pérdidas constantes que hicieron que el marcador apenas se moviera. Al descanso, el 31-32 dejaba un partido muy abierto, pero con la sensación de que el San Pablo había dejado escapar vivo al Kirolbet.

Partido igualado (25-22)

El paso por vestuarios no le sentó bien a  los locales. Baskonia saltó a la pista muy mal, algo que aprovechó el Miraflores. Con apenas 2 minutos jugados, el marcador era de 32-39 y obligaba a Berrocal a pedir un tiempo muero para impedir que el partido se le escapara.

Llegaron los mejores minutos del conjunto vitoriano, que de la mano de un acertado Stauskas y de un laborioso Shengelia en la pintura llevaban la igualdad al marcador con 2:30 por jugarse (47-47).  Baskonia amenazaba con romper el partido, pero McFadden arreglaba al final el parcial pese a su pésima selección de tiro (56-54 min 30).

Gran reacción azul (18-28)

El inicio del cuarto tuvo como protagonista a Shavon Shields. El alero danés entraba en partido y 7 puntos seguidos de su mano daban una buena brecha al Baskonia por primera vez en el partido. Benite volvía a aparecer para contener el tirón baskonista (66-62 min 35).

Llegaron los momentos decisivos y apareció de nuevo Thad McFadden. El escolta americano se sacó 2 triples de la chistera y devolvió el mando del partido al San Pablo. Baskonia se enredaba en el juego, incapaz de lograr un tiro liberado gracias a la gran defensa del Miraflores. Aún así, el marcador estuvo igualado, hasta que Bassas ponía el +4 en el electrónico con un triple dentro del último minuto. 

Kirolbet marraba su ataque y Benite casi sentenciaba el partido con inverosímil lanzamiento a media distancia tras reverso. El San Pablo regaló un balón tras no ponerlo en juego dentro de tiempo, pero Baskonia no estaba ya en el partido y devolvió el favor con un mal saque que puso la puntilla a un Buesa Arena que empezó a desalojar sus gradas. Al final, 74-82 para una victoria que mantiene muy vivas las opciones de Copa del Rey para el San Pablo Burgos.


LAS CLAVES

- Los tiradores: gran partido de Benite y McFadden. El brasileño siguió con su excelente línea de la temporada y regaló un muy buen partido, tanto ene ataque como en defensa. Se ha convertido en el flotador del equipo y en un jugador que aporta siempre que está en pista.

McFadden por su parte también tuvo un muy buen partido. Supo sacar al equipo del atolladero cuando hizo falta y reventó el partido con sus triples. Al americano le pone jugar con equipos grandes y se siente mucho más a gusto en estos encuentros. Eso sí, debería contener un poco más sus ansias y seleccionar mejor el lanzamiento, Aún así, se marchó a Burgos con 19 puntos y 6 asistencias para 21 de valoración.

- Clark y Shengelia anulados: el georgiano del Kirolbet Baskonia acusó la acumulación de esfuerzos y no estuvo fresco de cara al aro. Hacía todo bien, pero al final era incapaz de conseguir canasta, en gran parte gracias a las ayudas de Lima y Stevic bajo el aro. En labores defensivas estuvo como siempre, y anuló a Clark.

El americano hizo unos números decentes (12 puntos 6 rebotes), pero no fue su partido. No consiguió irse nunca de su par y sus puntos vienen de tiros libres o lanzamientos en los que la mala defensa Baskonista le dejaba libre por sus propios desajustes.

- Baskonia, muy mal: el equipo que mandaba desde la banda Josep María Berrocal no tuvo su noche. El grupo lleva una temporada muy mala, sobreviviendo por fogonazos de calidad y la consistencia de Shengelia a lo largo de los partidos. La situación venía mal, pero en los últimos minutos de bloqueo total contra el San Pablo, el conjunto vitoriano ha tocado fondo.

Mucha suerte ha tenido el Miraflores de encontrarse a este Baskonia. El equipo vasco apenas mueve el balón en ataque y muchos jugadores están muy desaprovechados o se mueven por la pista sin mucho sentido. Si consiguen rehacerse (que lo conseguirán), volverán a ser un equipo del nivel que se les presupone y serán de nuevo un hueso duro de roer, pero El San Pablo ya ha pasado por esa piedra y les ha superado.

- Las gradas, fiel reflejo del momento de ambos equipos: el graderío del Buesa Arena ha sido el mejor termómetro del momento de ambos equipos. La afición de Vitoria acudió en menor número del habitual en otras campañas. El equipo no transmite, está a la deriva y se venía de un partido desesperante en Euroliga frente al Real Madrid. El síntoma de la desconexión afición-equipo fueron las gradas perdiendo efectivos sin finalizar el partido.

Por contra, el San Pablo consiguió arrastrar un buen números de aficionados que dieron color y animaron mucho a su equipo. Durante varios momentos del partido parecía que era el Miraflores el que jugaba en casa. El equipo está jugando bien y se mantiene con opciones en Europa y en la Copa del Rey, algo harto complicado con 2 temporadas y lo que llevamos de esta en la Endesa ACB.

EL MVP

Vítor Benite: nuevo gran partido del brasileño. Fue el sustento del equipo en los peores momentos y no le tembló la mano para sentenciar el partido en los segundos finales. Al final, 19 puntos para 17 de valoración.

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