Contundente victoria del San Pablo Burgos frente a un desdibujado AEK de Atenas (93-76) en el Coliseum. El partido, correspondiente a la 12ª jornada de la fase de grupos de la Basketball Champions League es todo un balón de oxígeno para el Miraflores, que abre un pequeño espacio de ventaja sobre sus más inmediatos perseguidores y mete en problemas a los atenienses, que lleva 3 derrotas consecutivas y se ha metido en un lío impensable hace 21 días. Además de la victoria en sí, el conjunto de Joan Peñarroya consigue recuperar el basketaverage con los amarillos, por lo que esta victoria tiene doble valor.
El partido estuvo marcado por la lesión del mejor jugador de los atenienses, Keith Langford. El americano se tuvo que ir al banco con un presumible rotura fibrilar en la parte anterior de su muslo derecho. Sin su mejor hombre, los hombre de Papatheodorou naufragaron en una primera mitad sublime del San Pablo, que tuvo en Benite a su hombre más destacado. Con este resultado el conjunto azul duerme 2º de grupo empatado con el AEK, al que le ha ganado el basketaverage particular y a partir de ahora todo empate siempre va a favorecer a los burgaleses. Sin embargo no hay nada decidido, ya que tanto Bandirma como RASTA Vechta se encuentran a un partido de diferencia y el Anwil Wloclawek sigue a rebufo a 2 victorias de los burgaleses.
LA CRÓNICA
Lesión decisiva (24-13).
El partido empezó de cara para el Miraflores. EL conjunto burgalés estaba mejor plantado en pista y obtenía las primeras ventajas. En ese momento, Langford se lesionaba solo en una entrada a canasta, atascando aún más si cabe el ataque visitante (13-6 min 5).
El partido se jugaba al ritmo que le gusta al San Pablo, que en defensa estaba realizando una exhibición ante un AEK perdido sin su gran referencia en pista (24-13 min 10).
Benite revienta el partido (30-21).
El inicio del cuarto fue fulgurante. El San Pablo salía a comerse el mundo y se encontraba a un AEK completamente grogui. Benite empezaba a ajusticiar desde el triple y encontraba la ayuda de Rivero y Apic en la pintura (40-19 min 14).
El conjunto de Atenas estaba completamente fuera del partido, y por más que lo intentaba Papatheodorou no daba con la tecla adecuada. El partido bajó de intensidad cuando el Miraflores empezó con las rotaciones. Zisis y Grant se ponían las pilas y por lo menos mantenían a su equipo a una cierta distancia al paso por vestuarios (54-34 min 20).
AEK mejora pero no remonta (20-23).
El paso por vestuarios le sentó bien (a poco, la verdad) al equipo visitante. El AEK subía mucho la intensidad de su juego y empezaba a pelear en el partido. Los amarillos se entonaban, pero Benite abortaba cualquier intento de remontada (62-43 min 25).
Ray despertaba, y con 2 triples seguidos parecía meter en partido a los helenos, pero era un espejismo. 2 buenos minutos de Apic bastaron para contener la intentona griega, que encaraba los minutos finales con un claro 74-57 en el marcador.
Susto al final, pero victoria merecida (19-19).
Empezó bien el cuarto final el Miraflores, que no quería sorpresas. Sin embargo, tras un par de minutos, la intensidad ateniense superaba a la de un conjunto inmobiliario que se relajó un poco. La ventaja caía lentamente, hasta que con 81-65 en el marcador Peñarroya pedía tiempo muerto con 4 minutos por jugarse y ante el miedo a perder el average.
Parecía que el San Pablo estaba completamente fuera de partido, más aún cuando los triples de Crysikopoulos metían el miedo en el cuerpo a todo el Coliseum y bajaban la ventaja azul de los 10 puntos por primera vez desde el primer cuarto. En ese momento emergió McFadden, que con 2 triples providenciales en apenas 30 segundos finiquitaba el partido y aseguraba la doble victoria del San Pablo por 93-76.
LAS CLAVES
- Benite superstar: enorme de nuevo el brasileño. Rompió el partido en el segundo cuarto y en el tercero abortó todas las veces que fue necesario los intentos de remontada ateniense. Era un día clave y el escolta del San Pablo demostró que siempre se puede contar con él en los momentos calientes y en los partidos decisivos.
- La lesión de Langford: la baja del escolta simplemente rompió en 2 al equipo visitante. Sin su presencia en pista, el ataque ateniense se atascó de manera dramática en la primera parte, incapaz de generar opciones en ataque ante la buena defensa burgalesa.
Más allá de la baja en este partido, la lesión del MVP del AEK va a ser un factor muy a tener en cuenta en los próximos partidos, ya que sin su concurso las opciones de clasificación de los helenos se ven muy comprometidas.
- AEK, en un pozo que parece no tener fondo: el partido de los griegos fue realmente descorazonador. Como pollo sin cabeza, el conjunto de Papatheodorou deambuló por la pista sin un rumbo concreto, sobre todo en la primera mitad. Ray y Chalmers no acaban de ser decisivos en ataque y el equipo se atasca mucho. Las 3 derrotas consecutivas no son una casualidad y las bajas de Sant-Roos y Langford cambian mucho el panorama en el tercer equipo de Atenas. Para muestra del desastre que está siendo el equipo, el mejor del partido fue Zisis, un jugador de 36 años que no lleva ni 1 semana en la plantilla amarilla.
- Apic empieza a funcionar: primer gran partido del serbio en Burgos. El nuevo pívot del San Pablo es un jugador muy directo que no duda en buscar el aro, sobre todo jugando de fuera hacia adentro. Ante el AEK aprovechó muy bien los espacios y se peleó con todo el juego interior heleno. Recibió muchas faltas y fue mucho a la línea de tiros libres, donde tuvo un porcentaje (5/10, 50%) típico en un interior burgalés.
- Los triples de McFadden: cuando el partido se empezó a complicar en los instantes finales, apareció el americano. Los 2 triples en apenas un minuto acabaron con la resistencia del AEK, que tocó con la yema de los dedos enjuagar por lo menos la diferencia para mantener el average.
Los triples sin embargo no ocultan un partido en el que McFadden no anduvo especialmente fino en ataque. Si excluimos estas 2 acciones, logró apenas otros 6 puntos, poco para un jugador del que se esperan muchos puntos todas las noches de partido.
EL MVP
Vítor Benite: de nuevo, gran partido del que por el momento es el mejor jugador del San Pablo en lo que va de temporada. Frente al AEK anotó 23 puntos para otros 23 tantos de valoración. Todo ello en 30 minutos de juego, ya que apenas participó en el último cuarto.
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