jueves, 15 de abril de 2021

El Hereda San Pablo toca fondo ante Acunsa GBC (79-90). Bonus: llega el Joventut.

Nueva derrota y nueva mala imagen del Hereda San Pablo Burgos ante el Acunsa Guipúzcoa Basket (79-90). El conjunto vasco asaltó el Coliseum simplemente porque fue el equipo que puso más ganas sobre el parquet. Victoria vital para los hombres de Marcelo Nicola, que obtienen oro puro de una de las canchas más complicadas de la Endesa ACB. Un día más, el equipo de Joan Peñarroya adoleció de físico y sobre todo de actitud para poder ganar el partido. Con esta derrota, el Miraflores se aleja definitivamente del sueño de ser cabeza de serie en los playoff de la liga. El conjunto azul ha perdido 5 de los últimos 6 partidos que ha disputado. 



LA CRÓNICA

Buen Miraflores que no acaba de romper el partido (25-19).

Empezó el partido el Hereda San Pablo Burgos con su mejor cara. Jugando fácil y cómodo, el equipo local se destacaba en el marcador. Rivero se aprovechaba de que le defendía un alero como Radoncic para poner las primeras ventajas claras en el marcador. A Acunsa le costaba horrores anotar (11-3 min 3) y un tiempo muerto de Nicola sirvió para meter a los suyos en partido (14-7 min 5).

Benite abría ventajas por encima de los 2 dígitos, pero en vez de romper el partido, el Miraflores se perdía. Bajaba la intensidad en defensa, y un 0-5 de parcial de Carlson, metía de nuevo en partido a los vascos. Al final del cuarto, los triples de Acunsa le permitían llegar vivo (25-19) al nuevo periodo.

Desconexión burgalesa (14-24).

El partido volvió revolucionado. Ambos equipos se lanzaban al aro sin tapujos, y las malas defensas de ambos propiciaban muchas canastas. El partido seguía muy vivo, y Jasiel Rivero aprovechaba la falta de acierto momentánea de los de San Sebastián para poner de nuevo 10 arriba a los de Burgos. Poco duró la fiesta, ya que al filo del ecuador del cuarto, los triples de Tomàs y Dee metían de nuevo a los visitantes en partido (36-32 min 15).

Y en estas desapareció por completo el Hereda San Pablo. El conjunto de Joan Peñarroya era incapaz de anotar nada. Faggiano se hacía amo y señor del partido, y Acunsa enlazaba canastas hasta dar la vuelta al marcador. Peñarroya no daba con la tecla, y ni con 2 tiempos muertos conseguía cambiar la dinámica. El cuarto terminaba con un parcial demoledor de 3-21 en los últimos 5 minutos y gracias a que en los últimos ataques los vascos no vieron aro. Tras 20 minutos de partido, 39-43 en el marcador del Coliseum. 

Con opciones sin hacer nada (21-19).

El Hereda San Pablo tenía que cambiar diametralmente su intensidad en el partido. Tras el descanso era una buena opción, pero no hubo cambio. Ambos equipos saltaban a la pista fallones en ataque. Acunsa porque es lo que tiene, pero la actitud local dejaba muchísimo que desear (49-52 min 25).

Okouo rompía el partido. El poste del Acunsa se imponía en la zona sin mucha oposición por parte de los burgaleses, y disparaba la renta a los 8 puntos. El choque estaba en manos guipuzcoanas, pero les entró vértigo y no supieron rematar a un Miraflores inerte. Al contrario, el equipo de Joan Peñarroya remontaba por simple inercia, con un McFadden que parecía ponerle algo de ganas. Un triple del escolta americano sobre la bocina dejaba el electrónico en 60-62 al final del cuarto, muchísimo premio para un horroroso San Pablo.

Imposible ganar el partido (19-28).

Sin hacer absolutamente nada en 30 minutos, la diferencia abismal entre las plantillas de ambos equipos propició que un mal Hereda San Pablo llegara con sorprendentes opciones de ganar el partido. Pero para eso hay que ponerle ganas. Tras un inicio titubeante, Acunsa se dejaba de miedos e iba a por la victoria. Un buen parcial de 2-9 tras un triple de Tomàs, daba una ventaja enorme a los de San Sebastián (62-71) obligando a Peñarroya a pedir tiempo muerto con 7 minutos por delante.

No hubo reacción en absoluto, con una falta total de tensión de los jugadores azules. Acunsa no se lo acababa de creer, y sólo sus propios fallos le impedían romper el partido en mil pedazos. La ventaja visitante llegaba a los 10 puntos (66-76 min 35), y parecía reaccionar el Miraflores tras un 5-0 de parcial de Vítor Benite. 

Fue todo un espejismo. El partido moría con 140 segundos por jugarse con un triple de Faggiano.  No se lo tomó bien el conjunto local, que se puso a defender duro (a buenas horas) y concedía un carrusel de tiros libres. La puntilla al esperpéntico partido burgalés fue la descalificación de Benite tras una doble técnica en la misma jugada. Al final, 79-90 (máxima del partido) y victoria vital para un Acunsa Guipúzcoa Basket que asaltó el Coliseum porque fue el único equipo que le puso ganas de verdad.




LAS CLAVES

- Sin ganas: un día más: faltó hambre. El conjunto burgalés ha perdido las ganas de jugar al baloncesto. Empezando por su técnico. Joan Peñarroya empezó el partido en su línea, pero según se descomponía su equipo, el técnico burgalés iba desinflándose. Peñarroya, normalmente un entrenador duro, que no pasa una y que no duda en gritar a sus jugadores, se mostró manso, sin abroncar a los suyos en unos tiempos muertos en los que solamente marcaba la siguiente jugada. Como anécdota, el entrenador del San Pablo lleva varios partidos en los que no le pitan su típica técnica mediado el segundo cuarto.

Los jugadores también tienen su parte de culpa. Entre bajas formas (Cook, Horton), falta de implicación (Renfroe) o que simplemente se dejan llevar, nadie se pone al equipo por montera y tira de sus compañeros para salir del bache. En este partido se salvaron Benite, Salvó, Horton y Salash; que sin hacer un derroche físico ni de tensión, por lo menos parecía que le ponían ganas en algunos tramos. Salvar también a Sakho y Barrera, jugadores a los que Peñarroya se dejó los 40 minutos en el banco y que por lo tanto no tuvieron culpa alguna del espectáculo vivido en el Coliseum.

- Faggiano maneja el choque a su gusto: el base argentino del Acunsa parecía Marcelinho Huertas. Cuando saltaba a pista hacía y deshacía a su gusto, sin encontrar oposición alguna en el otro lado de la pista. Movió a  su equipo a gusto desde el segundo cuarto, y remató el partido con un triple a 2 minutos del final que abortó el acercamiento azul en el marcador.

- Okouo parecía Shaquille O'Neal: el poste africano del conjunto vasco se salió. Fue referencia en el partido, y rompió la defensa burgalesa de la zona cuando y cómo quiso. Un jugador tosco, sin muchas dotes técnicas y más bien lento se merendó por completo al juego interior azul él solito. Encima, el que mejor podía defenderle, Sakho, no saltó a la cancha ni un minuto.

En su canasta también hizo lo propio. A partir del minuto 15, cerró a  cal y canto su aro, poniendo varios tapones y cambiando muchos tiros. Sin lugar alguno a dudas, partido para que su agente haga un highlights de primera de cara a buscarle equipo el año que viene.

- Carlson cambia la dinámica: el ala-pívot americano cambió el partido. Salió al final del primer cuarto, cuando su equipo estaba 10 abajo. Supo leer el partido, y a base de triples y jugadas sencillas pero efectivas, puso a su equipo de nuevo en la lucha. Resultó clave para dar la vuelta al marcador en el segundo cuarto y siempre salió al rescate de su equipo cuando el Miraflores se acercaba un poco en el marcador.

EL MVP

Vinny Okouo: el africano fue amo y señor de ambas zonas. En un gran partido que no encontró demasiada resistencia, terminó con unos buenos 18 puntos, 9 rebotes y 24 de valoración, con un +15 con él en la pista.



BONUS: LLEGA EL JOVENTUT

Sin parar ni un sólo segundo, sigue la Endesa ACB. El Hereda San Pablo Burgos recupera uno de los partidos aplazados por culpa del coronavirus y juega, de nuevo en el Coliseum, frente al Joventut de Badalona (viernes 16 de abril 18:30h Movistar Deportes (53) Radio Arlanzón 98.6fm, burgosdeporte.com, burgosnoticias.com). Los verdinegros llegan al partido tras descansar en esta jornada intersemanal, así que empezará el partido mucho más fresco que los burgaleses, que si bien no han viajado, no va a tener ni 48h para recuperarse del tremendo palo moral del partido ante Acunsa GBC.


JOVENTUT DE BADALONA

Un año más, Grifols, dueño del Joventut desde hace 3 años, ha dado un impulso deportivo al equipo. En su hoja de ruta para dar rentabilidad al activo, los nuevos rectores de la Penya siguen dando valor deportivo al equipo para así resultar más interesante a patrocinadores. Con Carles Durán al frente, el cuadro de Badalona ha dado un nuevo paso adelante, recuperando a viejos canteranos y con fichajes que han dado un punto más de calidad al grupo. 

La plantilla

Mucha calidad en el puesto de base. Empezando por la penúltima perla de la cantera, el macedonio Neno Dimitrijevic. Jugador con una técnica e imaginación desbordante, es capaz de romper cualquier partido a base de talento. De vez en cuando se pierde, aunque cada vez menos. A su lado el contrapunto es el ex Miraflores Ferrán Bassas, un base más cerebral y con un gran tiro de larga distancia. Completa la rotación Demetrius Jackson, el típico americano anotador que no está teniendo demasiada importancia en el juego. Puede actuar de escolta si hace falta.

En el perímetro, destaca la explosión este año de Xabi López-Aróstegui, que ha dado un paso muy importante en anotación, sobre todo a base de triples. A su lado, la experiencia de Pau Ribas, un jugador que conoce muy bien el juego y con un gran lanzamiento lejano. La rotación la hace Albert Ventura, el perro de presa en defensa, y Shawn Dawson, un alero físico y con buen lanzamiento lejano que últimamente está masacrado por las lesiones. Completa la rotación el canterano Joel Parra, apuesta de futuro que muestra con cuentagotas su gran talento ofensivo.

En las cercanías del aro, destaca uno de los referentes de Europa en los últimos años. Ante Tomic pone en la madurez de su carrera su buen juego de espaldas al aro y su capacidad de determinar partidos bajo canasta. Su relevo es el canterano sueco Simon Birgander, buen proyecto de center dominador, con problemas en defensa ante rivales duros. En la posición de '4', Conor Morgan, un interior rocoso con un gran lanzamiento de lejos y Vlado Brodziansky, un jugador con grandes dotes para el ataque, tanto de 3 como en las cercanías del aro, pero al que le falta dureza física.

Cómo juega

El equipo de Carles Durán hace un juego sencillo buscando los espacios en la zona primero, con Tomic y Brodziansky, para después  intentar aprovechar las opciones desde el triple con su gran nómina de tiradores (López-Aróstegui, Ribas, Morgan, ...). En caso de atasco, balones a Dimitrijevic para que rompa defensas con su calidad individual.



LAS CLAVES

- El juego interior: Joventut cuenta con unos pívots muy buenos técnicamente, pero con un perfil blando en defensa. Tomic, Brodziansky o Birgander no destacan por sacar ventajas de sus pares a base de lucha bajo los aros. El derroche físico habitual de jugadores como Rivero, Horton o Sakho será vital para amarrar una victoria, ahora encima que el Hereda San Pablo anda con la mirilla desviada desde la línea de 3 puntos.

- La inspiración de Dimitrijevic: vital para el Joventut. Si el macedonio tiene su noche, va a ser muy complicado pararle. El base tiene una visión de juego privilegiada, y es capaz de jugar a una velocidad más que los demás de los jugadores en pista. Y la mayoría de las veces de forma acertada. Si tiene su día, el Joventut se convierte en una máquina de baloncesto muy complicada de parar. 

- Cambio de tendencia: tras 5 derrotas en los últimos 6 encuentros, el equipo necesita cambiar de aspecto. En la última semana, el Hereda San Pablo ha dado una mala imagen, algo que preocupa mucho más que las derrotas en sí. El último partido ante el Acunsa GBC fue especialmente doloroso, por la imagen ofrecida y por la poca entidad del rival. Choque de nivel en el que el Miraflores puede verse más en tensión y que pude ser propicio para por lo menos recupera la imagen perdida en estos últimos días.

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