Un San Pablo sin intensidad cae en Manresa (93-68).

Una vez más, el Hereda San Pablo Burgos  se marchó a casa con una derrota. El conjunto de Paco Olmos perdió contra el BAXI Manresa (93-68) en un partido horrible de los burgaleses. Los de Pedro Martínez jugaron un partido serio pero sin alardes, y se impusieron a pesar de su horrible 7/28 en triples. Por parte catalana, destacar el desempeño de Moneke bajo los aros y de Joe Thomasson, imprescindible en la primera parte perforando una y otra vez el aro del San Pablo. Nueva derrota, la quinta consecutiva del Miraflores, que no conoce la victoria desde la llegada de Paco Olmos al banquillo.

LA CRÓNICA

Sin defensa (25-15)

No empezó bien el partido. La defensa burgalesa no estaba centrada, y todo comenzó con un 6-0 de parcial. Despertó al equipo Eddie, voluntariosos en ataque y autor de las primeras canastas de los de Olmos (11-6 min 5).

Las canastas de Eddie acercaban a los castellanos en el marcador, ayudados por la falta de puntería manresana desde el triple. Y se apagaron las luces de repente. El San Pablo no veía aro alguno, y como seguía sin defender, las canastas de los de Pedro Martínez les sirvieron para un 9-0 de parcial que rompía el partido. Al final de los primeros 10 minutos, 25-15 en el electrónico.

Desastre (24-17)

Se puso las pilas de inicio el Miraflores. Con más intensidad, el partido estaba mucho más igualado. Sin embargo, la brecha en el marcador no bajaba, ya que la mejoría burgalesa le daba para igualar la intensidad de los locales, pero no para superarla (32-23 min 15).

Y apareció de nuevo Thomasson. El alero lideraba un parcial positivo para los de rojo que volvía a permitir a los locales irse por encima de los 10 puntos. En ese momento de inflexión se vino abajo el Hereda San Pablo. Moneke y Sima cerraban el aro catalán, y la ventaja no hacía sino subir acercándose peligrosamente a los 20 puntos. Al descanso, 49-32 en el marcador y partido completamente acabado.

Nada que destacar

Quedaba la quimérica esperanza de ver una reacción en el Miraflores que le metiera en partido, pero pronto se vio que no iba a ser así. Los de Paco Olmos seguían adoleciendo de actitud, y si no se corre no se puede ganar. Manresa seguía a lo suyo, sin alardes pero consiguiendo que Hereda San Pablo no anotara con comodidad. Al final de 20 interminables minutos, 93-68 en el marcador final y una nueva dura derrota para los de Burgos.

 LAS CLAVES

- Sin intensidad: fue el principal debe de los jugadores de Paco Olmos. Manresa siempre llegaba antes a los rebotes, corría en defensa más que los de Burgos y en los contragolpes fue mucho más efectivo. Por contra, en la parte burgalesa abundaron los contragolpes que sólo corría un jugador y los balances defensivos en los que 1 o  2 jugadores no llegaban a cruzar la línea de medio campo. En el baloncesto actual, si no corres lo mismo que tu rival, te pasan por encima, como ocurrió en este partido.

- Fatal en el tiro: ambos equipos. El San Pablo terminó el partido con 7/26 en tiros de 3 puntos (26%) y 21/43 en lanzamientos de 2 puntos (43%). Porcentajes muy pobres, que demuestran el mal partido de los de Paco Olmos.

No mejoró los porcentajes sustancialmente los manresanos. En triples terminaron con 7/28 (25%) y en tiros de 2 mejoraron, con un 25/45, un 62% propiciado sobre todo por tiros muy cómodos debajo de la canasta del Miraflores. Con ese porcentaje de triples, que un equipo te meta 93 puntos...

- Y BAXI Manresa jugó mal: lo cierto es que los de Pedro Martínez no tuvieron su noche. Jugaron mal, fallando muchos tiros abiertos. Les salvó que al otro lado de la pista no había un equipo que defendiera con intensidad, lo que les dio muchos puntos de segunda oportunidad o canastas relativamente fáciles en las inmediaciones del aro. Pocas veces jugará BAXI Manresa un partido este año ante un rival que le dé tantas facilidades.

EL MVP

Chima Moneke: gran partido de nuevo del nigeriano de BAXI Manresa. Fue una pesadilla para el juego interior burgalés y en apenas 22 minutos volvió locos a los Gamble, Nnoko o Eddie. Terminó el partido con 17 puntos, 9 rebotes y 26 de valoración, con un +16 de su equipo cuando estaba en pista.