El San Pablo Burgos se llevó su 4ª victoria en otras tantas jornadas de la Endesa ACB. Esta vez, el conjunto de Joan Peñarroya venció al UCAM Murcia (92-82) en un bonito partido de baloncesto que se vio deslucido por los 50 minutos que se tuvo que interrumpir por problemas técnicos. El reloj de posesión de una de las canastas falló y ese fue el tiempo que los operarios del Miraflores y el Ayuntamiento de Burgos tardaron en colocar unos nuevos relojes a pie de pista. Con esta victoria, el conjunto inmobiliario sigue de líder de la competición, a la espera de lo que haga el Real Madrid esta jornada.
Incidencias aparte, el partido tuvo 28 minutos muy buenos, en los que los 2 equipos demostraron que va a estar arriba en la clasificación. El San Pablo llevó durante casi todo el partido la ventaja en el marcador, pero Murcia tiraba de dureza y defensa para volver una y otra vez al choque. Gran primera parte de un casi infalible Thad McFadden, autor de 21 puntos al descanso, al que le cogió el relevo Vitor Benite tras el paso por los vestuarios. El parón del partido hizo mucho daño al encuentro, y su reanudación no se puede considerar una continuación en sí del partido. Los jugadores habían perdido el hilo al encuentro y ahí el San Pablo se mostró más efectivo logrando buenas ventajas que le hicieron vivir con mucha calma los minutos finales.
LA CRÓNICA
Igualados pero de maneras diferentes (21-20)
Salida en tromba del San Pablo con Fitipaldo a los mandos. El conjunto inmobiliario puso un 7-0 de salida que obligaba a Sito Alonso a pedir tiempo muerto con tan solo 1:38 jugados. La bronca surtió efecto, y el equipo pimentonero se entonaba con los triples de Booker y Eddie (14-9 min 5).
El Miraflores llevaba la batuta del partido hasta que el conjunto universitario dio con la tecla. Un quinteto con jugadores más físicos (Larentzakis, Rojas o Sakota) conseguía frenar el ritmo de partido y convertía el parquet en una encarnizada lucha por cada balón. San Pablo entró al trapo, pero los murcianos estaban más acostumbrados a ese ritmo y cerraron el marcador hasta el 21-20 de final del cuarto.
McFadden desatado (26-23)
El cuarto no empezaba bien para los locales. Clark cometía pronto su 2ª falta personal y acompañaba a Lima en el banco con la misma colección de personales. El choque estaba siendo muy disputado por ambos bandos, hasta que irrumpió McFadden. El escolta azul entró en racha y a base de triples rompía el partido. Nada podía hacer el UCAM Murcia, que respiró cuando al americano le dio por simular faltas y se fue al banquillo con su correspondiente técnica (39-29 min 16).
El partido amenazaba con romperse, pero el UCAM volvía de nuevo. Con un juego más pausado y elaborado, los pimentoneros tiraban de paciencia y sumaban como hormiguitas. McFadden volvía "on fine" de nuevo, pero Radoncic y Eddie mantenían a su equipo en partido (47-43) pese a que McFadden llevaba 21 puntos al descanso.
Problemas técnicos (17-9)
El paso por vestuarios frenó un poco el ritmo del partido. El UCAM Murcia bajó un poco la intensidad (normal por otra parte) y Booker y Eddie dejaron de ver el aro con facilidad. Por parte local, la canasta tampoco era muy propicia, pero Benite mantenía por encima con cierta solvencia al Miraflores (59-51 min 25).
Parecía que el partido se volvía a poner en marcha tras 5 minutos de tanteo cuando el reloj de posesión de una de las canastas decía basta. Tras intentar arreglarlo in situ sin suerte, los técnicos locales decidían cambiar los relojes sobre la canasta por otros colocados a pie de pista. El arreglo llevó unos soporíferos 50 minutos que rompieron el ritmo del partido a aficionados y jugadores. En el momento del problema técnico (minuto 28 de partido), el tanteo era de 64-52 favorable al San Pablo.
Otro partido por completo (28-30)
Casi 1 hora después de la interrupción, comenzó un nuevo partido de 12 minutos en el que el San Pablo llevaba 12 puntos de ventaja. El conjunto inmobiliario salió mejor plantado a la cancha, con Benite manteniendo el pulso anotador. Murcia no encontraba puntos con facilidad, con Booker y Eddie claramente fuera de partido. Sito Alonso encontró un equipo que sumaba (de nuevo con los menos habituales) pero el encuentro ya se les había escapado de las manos. Un buen par de triples de Sakota y Lecomte ponían al Murcia a menos de 10 puntos, pero el partido estaba finalizado. Al final, 92-82 que deja al San Pablo como virtual líder de la competición a la espera de lo que haga frente al Montakit Fuenlabrada el Real Madrid.
LAS CLAVES
- El show del marcador: de risa. Falló el reloj de posesión de una de las canastas del Coliseum y empezó el espectáculo. Primero hasta que vieron lo que pasaba, a ver si podían arreglar el entuerto y al final a buscar por los polideportivos de Burgos un sistema de reemplazo. Al final, parece que encontraron los relojes de posesión del José Luis Talamillo y los pusieron a pie de pista para ambos equipos. Al final, el resultado fueron 50 minutos de interrupción que hicieron al partido eterno (casi 3 horas) y que le privaron de emoción al encuentro.
¿Por qué no había un reloj de repuesto en el Coliseum? Según se comentaba, el coso burgalés no contaba con él porque hace 2 días se había roto uno en el entrenamiento del San Pablo. Motivo de más para tener preparado un sistema de emergencia por si falla y te quedas sin repuesto. Cada uno que saque sus conclusiones. Por si fuera poco, los relojes del Plantío, los más cercanos, no se podían utilizar porque el Tizona jugaba su partido a las 20:30.
- El show del trío arbitral: vaya partido se marcaron los árbitro. Mal en general, sin beneficiar a ningún equipo. Desde decisiones que ni el acta de la mesa recoge qué pasó exactamente, revisiones de jugadas un minuto después de que ocurra la jugada en cuestión, faltas que sólo ellos veían, ... Partido para olvidar del trío.
Por si esto fuera poco, la mesa tampoco ayudó, parando el tiempo tarde duando pitaban los árbitros, tocando a tiempo muerto cuando lo que se había pedido era un cambio, .... Y de remate todo el lío con el reloj de posesión.
- Killer McFadden: gran partido del escolta americano. Imparable en el 2º cuarto, McFadden tuvo unos minutos en los que parecía Stephen Curry. Con una racha increíble, el escolta azul era completamente imparable., con 7 triples en la primera mitad.
El problema es que en toda la segunda mitad del partido, tan sólo contribuyó con 2 puntos más.
- Los triples: el Miraflores batió su récord de triples en la ACB. Con 18 , el conjunto de Joan Peñarroya acribilló al UCAM Murcia. Destacados en ese aspecto McFadden con 7, Benite y Fitipaldo con 4. El equipo acabó con un muy buen 48% de acierto.
Todo lo contrario desde la línea de tiros libres. Con un acierto normalito, el San Pablo hubiera superado los 100 puntos. Sin embargo, el conjunto inmobiliario se fue a casa con un paupérrimo 10/22, y los últimos aciertos maquillaron un poco el desastre. En este partido no hizo falta, pero una serie de este tipo te puede costar un partido.
- Partido muy duro: el partido fue muy exigente en el apartado físico. Jugadores como Huskic o Benite se las tuvieron tiesas con sus defensores, y cada acción de juego salían trastabillados. Este encuentro se saldó con victoria, pero se va a pagar, veremos cuánto, en los siguientes choques, empezando por el de este miércoles frente al Antwerp Giants de la BCL.
EL MVP
Thad McFadden y Vitor Benite: los escoltas del San Pablo se reparten el premio. McFadden destacó con 23 puntos y 20 de valoración. Eso sí, 21 de ellos en la primera mitad. Benite consiguió 19 puntos, la mayoría de ellos tras el descanso. Entre ambos, 40 puntos y 11 triples.
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